¿Es sensación mía o cada vez empieza antes la Navidad? La verdad es que no se si es el afán de
consumismo descarado o que una se hace mayor... pero ya no me parecen estas fechas tan maravillosas como antes, supongo que al faltar los mayores, el tener que gastar un dineral en comidas, cenas y detallitos que, casualmente aumentan sus precios a la que se acerca el final del año, enturbian un poquito la "blanca Navidad", esa Navidad a la que solo nuestros niños pueden devolver la magia.
El caso es que, esta misma mañana, venía de camino hacia el trabajo, cuando un anuncio en la radio ha llamado mi atención, al parecer la marca comercial Suchar este año propone, a quien quiera que les mande sus fotografías y recuerdos de Navidad para así, confeccionar su spot navideño, con un poquito de todo el que desee compartirlo.
En fin, ya me conocéis... mi cabeza ya ha empezado a cavilar, recuerdos e imágenes han ido apareciendo como una película a cámara rápida de lo que un día fueron las Navidades... cuando nos reuníamos todos los primos en casa de los abuelos después de un año sin vernos, la emoción nos invadía a los más pequeños y, los mayores, ilusionados, preparaban todo para volver a abrazarnos y que todo resultara perfecto.
La abuela cocinaba durante horas la cena más deliciosa que puedo recordar para la Noche buena, mamá y la tía lo decoraban y preparaban todo, mientras nosotros jugábamos bajo la mesa del salón imaginando que era una caravana en la que viajábamos por el mundo para acortar la espera hasta que llegara el gran acontecimiento de la noche.
Después de la cena, los cinco primos ya impacientes, nos reuníamos frente al gran ventanal, donde el tío nos tenía durante, según nos parecía entonces, horas aunque, en realidad supongo serían minutos, que se hacía muy largos... Nos contaba que Papá Noel no llegaba hasta que los cristales no se empañaban por completo y que anunciaba su llegada con una estrella fugaz que, evidentemente cada año creíamos ver!! Recuerdo con un salto al corazón cuando gritaba: "YA!! YA HA PASADO LA ESTRELLA!!! ¿LA HABÉIS VISTO CHICOS?" todos respondíamos con un entusiasmadísimo SIIII mientras corríamos hacia la habitación donde cada año, Papá Noel nos dejaba los regalos.
Creo que el recuerdo del rencuentro con mis primos, tíos y sobretodo, hoy que no están, con los abuelos, es el más maravilloso que guardo de mi infancia y, sólo porque no quede nunca en el olvido, vale la pena celebrar la NAVIDAD.
Y tras escribir estas líneas me gustaría que, todo el mundo, a pesar de los problemas, de las dificultades por las que pasemos, hagamos el esfuerzo por hacer estos días mágicos para nuestros pequeños.
https://www.suchard.es/