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domingo, 22 de febrero de 2015

DESAPARECER

 
 
 
 
 
En honor a todos esos días en los que querrías salir corriendo, en recuerdo de los amores olvidados, de los que pasaron, de los que dejaron su granito de arena en tu playa, por los momentos en los que pensaste que el mundo se te venía encima y porque finalmente siempre sale el sol, hoy quiero compartir con vosotr@s este tema que, sin saber por qué, me cautivó desde la primera vez que lo escuché.
 



He salido a caminar por fin
y ahora nadie me acompaña
He salido de dentro de ti
Y no echo nada en falta
A dejarlo todo escrito
que se vea en mi pared
A pensar que lo que siento
no esta dicho pero es
A decírtelo clarito sin quererme revolver
Y a decirte que te escribo
porque si hablo llorare

Ni pienso ni busco
ni quiero volver
No quiero ni verte
ni hablar ni saber
Yo quiero irme lejos
tanto como pueda
Quiero que me veas desaparecer
He salido a respirar por fin
Y ahora el aire me acompaña
He sentido estar cerca de mi
Y no echo nada en falta
A dejarlo todo escrito
que se vea en mi pared
A pensar que lo que siento
no esta dicho pero es
A decírtelo clarito sin quererme revolver
Y a decirte que te escribo
porque si hablo llorare

Ni pienso ni busco
ni quiero volver
No quiero ni verte
ni hablar ni saber
Yo quiero irme lejos
tanto como pueda
Quiero que me veas desaparecer
 
 
A veces uno necesita un poco de espacio, tomar un poco de aire para seguir adelante. El espacio vital es eso, vital y cada uno lo encuentra a su manera, en un sitio u otro, en un estado, por un minuto o por una vida entera... O a veces se puede alcanzar al cobijo de una melodía porque la música te puede llevar a cualquier lugar. Tod@s tenemos canciones que nos emocionan, que nos motivan, que nos hacen reír o nos hacen llorar y ésta tiene algo especial para mí. Espero que os guste.
 
 
 
 
 
 
 
 

jueves, 19 de febrero de 2015

CÓMO CONVERTIRSE EN UN ADULTO SIN MORIR EN EL INTENTO

 
 
¿Recuerdas aquella época en que el mundo conspiraba contra ti? ¿Cuándo nadie parecía comprenderte? ¿Aquellos días en que te emocionabas pensando ilusionado en qué harías al salir de la escuela y después todo se torcía? ¿Cuándo tus padres querían amargarte castigándote sin ir a la excursión que habías planeado con los chicos para el fin de semana? ¿Cuándo todo era una fiesta y, de repente solo querías encerrarte en tu cuarto?
 
Algunos pensaréis, "¡¡ si justo ayer!!" y es que todos conservamos algo de adolescentes, unos más a la vista y otros un poco más escondido pero no me refiero a eso, os hablo de la edad en que ya te sientes mayor, y lo eres, aunque los mayores no quieran acabar de aceptarlo pero todavía no eres consciente de que queda muchísimo por aprender para enfrentarte solo a la jungla que supondrá en adelante tu existencia.
 
Muchos guardamos estas percepciones como recuerdos que revivimos al tener hijos, sobrinos, cuñados menores... pasando por ese trago. Lo cierto es que la situación no es fácil de afrontar porque el inevitable instinto de protección distorsiona, en cierto modo, nuestra memoria que, por otro lado, no debe influenciarnos más que lo justo a la hora de educar puesto que cada persona es distinta y los tiempos cambian.
 
A menudo nos cuesta empatizar con el prójimo y, aunque desde nuestro punto de vista, no veamos el
problema como tal, para el que lo vive si es importante y no sólo eso, si tomamos la vía de quitarle toda la importancia, puede agravar la situación potenciando el sentimiento de incomprensión . Además, a ciertas edades, nos encontramos en un punto de inflexión en el que podemos, inconsciente y contrario a nuestros deseos, empujar al joven a un camino equivocado. En general, las personas, pasamos por momentos en que la falta de atención o del cariño que reclamamos nos puede conducir a acercarnos a personas poco apropiadas, sobretodo a determinadas edades y, sin ser protectores en exceso, los padres, tíos, hermanos o tutores debemos evitarlo pues nos encontramos en la etapa en la que el niño deja de serlo y se está forjando definitivamente como adulto, pero, ¿CÓMO? No soy nadie para dar lecciones pero si se lo importante que es el diálogo y la comunicación. Hay que escuchar, ponerse en el lugar del otro y entender.
 
Vivimos en un tiempo en que los adultos estamos constantemente estresados, sumidos en el trabajo, en nuestras preocupaciones y, a veces, sin darnos cuenta, descuidamos cosas muy importantes. Es bueno que nuestros hijos puedan ir a buen colegio, que coman bien, que lleven buena ropa pero también es muy importante que sepan cuánto hay que luchar para que ellos tengan todo eso y nosotros, desde nuestra perspectiva, no debemos perder de vista que ellos también tienen sus conflictos.
 
En los últimos años he observado que nuestra sociedad ha creado "monstruitos malcriados y exigentes" por la comodidad de sus padres, es posible, pero mucho cuidado con esto porque la permisibilidad en exceso o contrariamente la falta de atención puede tener consecuencias muy graves y con difícil boleto de retorno.
 
Quiero pensar que todos los padres adoran a sus hijos y darían su vida por ellos así que, hagamos el esfuerzo de comunicarnos y transmitirles nuestro amor para que sepan cuánto les queremos y forjemos un futuro lleno de hombres y mujeres sensatos y honestos.
 
Por otro lado y ya para acabar, si alguno de los lectores del BLOG DE MYNORITA, os encontráis en una situación delicada en que os sentís incomprendidos pensar que, vuestros padres, hermanos o tíos a su modo, hacen las cosas lo mejor que pueden pensando siempre en vuestro bien, que no podéis olvidar eso porque la vida siempre os presentará dificultades pero, en los momentos buenos y sobretodo en los no tan buenos, ellos siempre estarán ahí.
 
 
 
 
 

miércoles, 11 de febrero de 2015

Y DETRÁS, ELLA

Suave armonía el balanceo de sus tacones
Paso firme sobre la acera, alas frágiles en la casa.
Melodía en la sonrisa, lágrimas en la cara
La más dulce de las tentaciones
Pequeña de mamá y papá, muñeca para quién sabrá
princesa en el hogar, reina de sus armas por ahí
Perdida en las dunas, ahogada en el mar
náufraga de mil noches sin dormir
Ternura de niña, cautiva en cuerpo de mujer
Jugando al prohibido fruto del azar  
instinto animal tras el telón de la inocencia
 en la consciencia, un sueño por alcanzar
Y detrás, ella


miércoles, 4 de febrero de 2015

MEZCLANDO CULTURAS


Mientras unos se disputan las explotaciones petrolíferas, se declaran la guerra por invadir territorios o entran en graves disputas por sus respectivas creencias religiosas, otros, sin saber muy bien cómo, optamos seguramente de forma inconsciente, por enamorarnos y fusionar culturas muy diversas. No hablo de que esto sea la gran hazaña, ni ninguna proeza es simplemente la diferencia entre enamorarse de un color, una lengua, un estatus y hacerlo simplemente de una persona independientemente de su raza o religión. 
 
Tal vez la historia se repite... Igual que pasó en este país en años de post guerra, en que se dio una salida casi masiva de españoles hacia todas las partes del mundo, en las últimas décadas hemos recibido en Europa, por motivos dispares, ciudadanos de nacionalidades muy diversas y eso, sin lugar a dudas tiene consecuencias. Consecuencias, desde el punto de vista de la diversidad cultural, muy interesantes.
 
Cuando veo en televisión noticias sobre unos pocos que no se adaptan y otros tantos que rechazan tengo la sensación que sólo se muestra una cara de la moneda, una vertiente real, cierto, pero no la única porque ya somos unos cuantos que, por caprichos del destino, fuimos alcanzados por otro tipo de flechas, "flechas de cupidos extranjeros"; Españoles aprendiendo de cubanos, colombianos, dominicanos, italianos, chinos o franceses, ingleses con argentinos... Y al revés del mismo modo, mezclas curiosas pero en cualquier caso, historias de amor.
 
Por mi experiencia, reconozco que aunque tengamos similitudes y para nórdicos o anglosajones podamos ser todos latinos, una descubre grandes diferencias entre latino-europeos y latino-americanos pero vamos, no nos engañemos, que si cada casa es un mundo imaginaros cada país o cada continente...
 
Personalmente he tenido la suerte de adentrarme en una cultura maravillosa, la cultura de la bachata, la salsa y el merengue, de la música sonando siempre y que cualquier excusa sea perfecta para improvisar una fiesta en tu casa, en la mía o en la misma calle. La cultura del plátano frito, el mangú y el aguacate acompañado de arroz en la mesa de todas las casas sin importar la hora que sea. La cultura del "bien, tranquilo", del "cocotaso" y del vivir siempre "en olla" y contento. 
 
Por otro lado, en lo estrictamente histórico-cultural, por decirlo de algún modo, te das cuenta de cómo podemos ser manipulados unos y otros y es que al fin y al cabo, la mayoría no sabemos más que lo que nos enseñan en la escuela, ¿no? Pero es curioso, cuando uno sale un poco al mundo, más allá de los viajes organizados y los resorts y te empapas de los conocimientos de otros pueblos, lo distintas que pueden verse las realidades dependiendo del prisma desde el que se miren... Me refiero, por poner un ejemplo, al descubrimiento de América, os aseguro que lo que nos enseñaron aquí no se parece a la historia que transmitieron a los "conquistados". En fin, dicen que la información es poder y, de cualquier forma siempre hay que escuchar las dos versiones de la historia.
 
La verdad es que muchas veces pienso que si dejáramos a un lado los prejuicios y nos interesáramos un poco más por las costumbres y maneras de hacer de "los vecinos", seríamos mucho más ricos, más ricos en lenguas, en expresiones, en formas de vivir, definitivamente en cultura. ¿Os imagináis cómo sería coger lo mejor de cada país?
 
Algunos ya se han atrevido a abrir sus mentes y a experimentar el interesante placer de mezclar sus culturas...
 
 


 
Algunos datos sobre LA EMIGRACIÓN ESPAÑOLA HACIA EUROPA EN LOS AÑOS 50
Un artículo interesante, desde un prisma distinto del "DESCUBRIMIENTO DE AMERICA"